domingo, 10 de agosto de 2014

Recondando a Simón Diaz


Hoy, se conmemora el natalicio de Simón Díaz, quien nacio el 8 de agosto de 1928 en pueblo de Barbacoas en el estado Aragua (región central de Venezuela) y en homenaje a él publicamos esta biografia tomada de www.simondiaz.com. A

Simón Diaz

Es el más célebre músico, compositor e intérprete del género popular venezolano y su obra es considerada como uno de los legados más importantes tanto para la música popular venezolana como para el repertorio musical del resto del continente. Conocido mayormente por el rescate de la Tonada Llanera, Simón Díaz, convencido de que la tonada del llano venezolano es un aire musical de características únicas, se dedicó enteramente a difundirla, estudiarla y componerla hasta constituirla en un auténtico género musical en el que han conseguido expresarse grandes artistas como Mercedes Sosa (Argentina), Caetano Veloso, Ivan Lins y Joyce (Brasil), Joan Manuel Serrat (España), Danny Rivera, Ednita Nazario, Cheo Feliciano y Gilberto Santa Rosa (Puerto Rico), Franco De Vita (Venezuela), entre otros. Así mismo, destacados directores y compositores de la música académica han llevado las tonadas de Simón Díaz al lenguaje de la orquesta sinfónica y arreglos corales, sellando de esta manera el carácter universal de este género musical. 

Pero los músicos no han sido los únicos atraídos por las tonadas de Simón Díaz, también lo han sido artistas de otras disciplinas como es el caso de la reconocida coreógrafa alemana Pina Bausch, quien incluyó algunas de estas tonadas de Simón Díaz para musicalizar su obra "Nur Du". Por otra parte, el reconocido director de cine Pedro Almodovar también incluyó en la banda sonora de su película "La Flor de mi Secreto", una tonada de Simón Díaz que lleva por nombre "Tonada de Luna Llena", en versión de Caetano Veloso.
Su pasión por el canto y la actuación lo lleva al teatro, el cine y la televisión, proyectándose en los años 60 como uno de las más grandes humoristas de Venezuela y símbolo de las más genuinas expresiones del folklore y la cultura popular. 

Del trabajo realizado en su país: Hasta el momento ha sido actor principal de 3 obras de teatro y 5 largometrajes, ha producido y conducido 12 diferentes programas de TV de altísima sintonía, todos diseñados para promover la música venezolana, y uno de ellos, lo dedicó a la enseñanza de la cultura popular sólo para niños, éste programa estuvo 10 años en el aire, y de esta experiencia Simón Díaz pasó a llamarse "Tío Simón", nombre con el que se le conoce cariñosamente. Mantuvo la conducción de un programa diario para la radio por espacio de 25 años, también dedicado al folklore y la música venezolana; en su record discográfico cuenta con más de 70 producciones musicales. Son innumerables las actuaciones artísticas que ha realizado a lo largo de su carrera, y en la que ha compartido el escenario con artistas como Mario Moreno "Cantinflas", Plácido Domingo, Lucho Gatica, Marco Antonio Muñíz, Joan Manuel Serrat, Mercedes Sosa, Atahualpa Yupanqui, entre otros. De esta fructífera carrera, celebró en el año 1998, "Los 50 años de Vida Artística".

Ha recibido los premios más importantes que otorga su país en materia musical. Fue distinguido con la más alta condecoración que otorga el estado venezolano, como lo es la "Orden del Libertador en su Orden de Gran Cordón", constituyéndose en el único artista nacional al que se le haya impuesto dicha distinción. Ha representado a su país en Francia, Inglaterra, España, Polonia, Hungría, Irak, Estados Unidos, México, Panamá, Puerto Rico, Ecuador, Chile, Brasil, Cuba y Colombia.

Conocido internacionalmente por ser el autor de "Caballo Viejo" (también llamada Bamboleo), las composiciones de Simón Díaz, al margen de la tonada, han sido interpretadas por artistas como Plácido Domingo, Ray Conniff, Julio Iglesias, Celia Cruz, Rubén Blades, Gilberto Santarrosa, Gipsy Kings, Tania Libertad, María Dolores Pradera, Armando Manzanero,Barbarito Diez, Ry Cooder, Martirio y Oscar de León. 
De este modo, Simón Díaz, además de ser el personaje icono de la venezolanidad, es también uno de los compositores populares más valiosos y universales de América Latina, convirtiéndose así en una referencia obligada y pieza indiscutible de la historia de la música popular, tanto en Venezuela como en el resto del mundo. 
La prestigiosa cadena de televisión A&E Mundo ha producido un documental en su espacio “Biography” dedicado a la vida de Simón Díaz que se estrenó en el mes de septiembre de 2004.

Actualidad



El dinosaurio que ha sido descubierto en Venezuela: Laquintasauria

Por Prodavinci | 8 de Agosto, 2014



Kashmira Gander ha publicado para The Independent una nota sobre el “Lanquintasauria”, una nueva especie de dinosaurio descubierto en la formación La Quinta, en Venezuela. Se trata de un dinosaurio de un metro de largo que, según los expertos, pudo haber vivido en grupos durante el Triásico, un periodo geológico de hace 250 a 200 millones de años atrás, lo que lo convierte en el primero de los dinosaurios ornitisquios. Es decir, la primera de las especies que desarrollaron “caderas de ave” y en tener interacciones sociales.
Se cree que el Lanquintasauria Venezuela era un herbívoro bípedo, aproximadamente del tamaño de un perro, que podía alcanzar a vivir entre 3 y 12 años, aunque por la ligera curvatura de algunos de sus dientes, se cree que también comía insectos o algunos animales pequeños.
El descubrimiento, según paleontólogos como Paul Barret, es muy importante sobre todo por las luces que puede arrojar sobre la evolución de los dinosaurios: “Es emocionante descubrir una nueva especie de dinosaurio, pero hay muchas primeras sorpresas con el Laquintasauria. No sólo expande la distribución de los primeros dinosaurios, sino que su edad es importante para entender su evolución temprana y su comportamiento. El Laquintasauria vivió después de la mayor extinción, al final del periodo Triásico, hace 201 millones de años, demostrando que los dinosaurios se recuperaron rápidamente de este evento”.
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sábado, 9 de agosto de 2014

Trujillo: Tiene un capital humano en paleotología y es un referente paleontológico


Jorge Carrillo es Geólogo profesional y destacado Paleontólogo, nacido en el estado Trujillo. Desde muy joven, mostró un interés precoz por la naturaleza y el medio ambiente, sobre todo en la fauna marina y la cultura pesquera de su región natal. Curso con éxito sus estudios en geografía en la Universidad de los Andes (Mérida, 2008) y en 2011 realizó su maestría en Oceanografía en la Universidad de Valparaíso en Chile. Tiene amplia experiencia en el área de pesquisas y trabajo de campo paleontológico en Argentina, Chile, Colombia, panamá y Venezuela, donde ha colaborado en el descubrimiento y posterior investigación de diversos especímenes de fauna prehistórica en general, a la par que amplía su formación académica y científica en la ciudad de Zúrich, Suiza.

 Actualmente, encabeza junto a un equipo de expertos nacionales, la administración y apoyo del Museo Paleontológico de Urumaco en el estado Falcón y desarrolla un proyecto de investigación sobre diversos vertebrados marinos, más específicamente tiburones y rayas del Cenozoico suramericanotre sus hallazgos e investigaciones, destacan diversos aportes en las áreas de la preservación del ambiente y la naturaleza, la geología y el hallazgo de diversos fósiles en nuestra región como: 



1) El fósil más completo del mundo, hallado en Venezuela (Estado Trujillo) del enorme Pez Buldog Xiphactinus, en la Formación la Luna.

2) Fósiles de invertebrados y peces marinos prehistóricos del Caribe. 

3) Restos de tiburones fósiles como Ptychodus y el gigantesco Megaselochus megalodon.

4) Excavaciones e investigaciones conjuntas con otros expertos; de Tortugas, cocodrilos y gaviales de la Fauna de Urumaco; entre las que destacan el cocodrilo pelicano Mourasuchus y el gavial gigante Gryposuchus.

5) Apoyo en la investigación científica de la megafauna prehistórica Venezolana. 
Museo Paleontológico de Uruamaco, Falco - Venezuela
En una reciente entrevista concedida a Gilcely Linares (Diario El Tiempo, 08/08/2014) él científico Jorge Carrillo, candidato a Doctor en Paleontología y Evolución, en la Universidad de Zúrich, en Suiza, como parte del equipo que acompaña a Marcelo Sánchez Villagra, expresó que el estado Trujillo es un referente paleontológico. Precisó que han sido encontrados restos fósiles de rocas volcánicas con 100 mil años de antigüedad, yacimientos con plantas de hace 300 millones de años, así como animales marinos como peces, tiburones u otros. Otros hallazgos pertenecen a caballos prehistóricos, perezas terrestres de cuatro toneladas y cinco metros de largo, armadillos gigantes con tamaño similar a un automóvil; además de gonfoterios, que son parientes cercanos a los elefantes, mamut y mastodontes. Carrillo ha estudiado ambientes marinos y fauna, existentes en los afluentes trujillanos antes del levantamiento de la cordillera andina, con una data de 142 y 65 millones de años. Asimismo, recordó que la formación geológica La Quinta aflora en zonas trujillanas, evidenciadas en las sucesiones rocosas con coloración roja, alusivas a la gran cantidad de hierro y restos volcánicos, que demuestran la separación de América del Sur y América del Norte durante el jurásico. Conferencia paleontológica A las 3:00 p.m., del 23 de agosto, habrá una conferencia sobre paleontología venezolana, capítulo especial los andes y la primera especie de dinosaurios encontrados en la formación geológica La Quinta. Será una actividad sin fines de lucro, con participación de unas 500 personas, quienes conocerán las investigaciones paleontológicas e incluso apreciarán algunos hallazgos.

Fuentes:
Gerardo Guillen Poleo para Jurassic Park Site V
Gilcely Linares (Diario El Tiempo, 08/0/2014)









“Laquintasaura venezuelae”: Primera especie de dinosaurios en el país

Jorge Carrillo(Paleontólogo)
Jorge Carrillo, paleontólogo trujillano, anunció en exclusiva a Diario El Tiempo el registro científico internacional de la primera especie de dinosaurio venezolano con el nombre de “laquintasaura venezuelae”, de tipo ornitisquios o dinosaurio con cadera de ave, la cual habitó hace 201 millones de años en la zona andina. Estudios taxonómicos, sistemáticos y morfológicos, liderados por el venezolano-argentino Marcelo Sánchez Villagra, realizados a fósiles encontrados en la formación geológica de La Quinta, cercana al poblado de La Grita, en Táchira, indican que el reptil era herbívoro, bípedo, medía casi un metro, tenía un peso máximo de 15 kilogramos, un cuerpo con forma de barril, extensa cola y cabeza alargada con boca angosta

Tras cumplir con la recaudación de fósiles y análisis científicos, se comprobó la existencia de la primera especie de dinosaurios venezolanos. La comunidad científica internacional avaló este seis de agosto los respectivos procedimientos, con la publicación del artículo “A palaeoquatorial ornithischian and new constraints on early dinosaur diversification”, bajo el liderazgo del paleontólogo argentino-venezolano, Marcelo Sánchez Villagra, en la Revista Inglesa “Prodeedings og The Royal Society”. 
       La buena noticia fue dada en exclusiva a Diario El Tiempo por el paleontólogo y geógrafo trujillano, Jorge Carrillo, quien explicó que los hallazgos datan de los años 80, con prosecución de investigaciones hasta la actualidad; abriendo así una ventana a la descripción de un nuevo género y especie de dinosaurio, es decir, “laquintasaura venezuelae”, en alusión al descubrimiento de fósiles en la formación geológica La Quinta, cercana al poblado de La Grita, en el estado Táchira, de tipo ornitisquios o dinosaurio con cadera de ave, entre los cuales se encuentran el stegosaurus, triceratops y muchos otros que paradójicamente no incluye a las aves.
       Para Carrillo, “la comunidad científica nacional está de fiesta al comprobarse con estudios taxonómicos, sistemáticos y morfológicos la vida de dinosaurios en Venezuela, específicamente en la zona andina, hace 201 millones de años. La investigación trae consigo positivas implicaciones ecológicas, culturales, geográficas, biológicas y científicas, e incluso invitan a darle continuidad a trabajos similares”.
       Detalles
       Al grupo de especímenes localizados en La Quinta no se les pudo determinar su sexo, sin embargo al momento de morir, posiblemente por un evento catastrófico, tenían entre 10 y 12 años, mientras que su tamaño era casi de un metro, con un peso máximo de 15 kilogramos, un cuerpo con forma de barril, extensa cola y cabeza alargada con boca angosta.
       El material fósil encontrado en la cantera de la mencionada formación geológica, incluye individuos de la misma especie, representado por los dientes, huesos del cráneo, de las extremidades y de la columna vertebral, pertenecientes a la era mesozoica con límites entre los períodos triásico y jurásico.
       El esqueleto grácil y delicado del ornitisquio de La Quinta, sugiere que eran dinosaurios bípedos que caminaban sobre las patas traseras, capaz de correr a gran velocidad.
       No existe ninguna evidencia de armadura o placas en la piel ni características para que los dinosaurios venezolanos se defendieran, como cachos o garras. Por la forma de los dientes se detectó que “laquintasaura venezuelae” era herbívoro, pero en raras ocasiones consumía insectos o pequeños animales.
       La combinación de estos rasgos en la dentición no había sido descrita para ningún otro dinosaurio, y sumado a otros aspectos anatómicos del esqueleto fueron la base al permitir justificar la creación de la primera especie de dinosaurio conocida en Venezuela.

       Investigaciones
       En la década del 80 un equipo de paleontólogos franceses fue el primero en hallar elementos fragmentarios de huesos y un diente no diagnóstico de dinosaurio en La Quinta, quienes tiempo después publicaron los resultados, asignándole, en el momento, el género lesothosaurus, conocido del jurásico temprano de África.
       Ya en los 90 el profesor John Moody, colectó muchos materiales para el Museo de Biología de la Universidad del Zulia, también lo hizo Sánchez Villagra, los cuales están en la Universidad Simón Bolívar.
       En el 2008 Sánchez Villagra publicó el libro: Venezuela Paleontológica, Evolución de la Biodiversidad en el Paso Geológico, con contribución de 24 autores y 102 ilustraciones originales, dedicando el Capítulo 6 a los Dinosaurios del Táchira.
       Los estudios recientes sobre el material de La Quinta cuentan con la colaboración de científicos alemanes, norteamericanos y suizos, entre ellos Paúl Barrett, Richard Butler, Roland Mundil, Torsten Scheyer y Randall Irmis, mientras que el trabajo curatorial y de preparación estuvo a cargo de Jorge Carrillo.
       Los interesados en observar o estudiar el material fósil pueden dirigirse al Museo Arqueológico del Táchira, Universidad del Zulia y Universidad Simón Bolívar, donde existen colecciones paleontológicas. No obstante, la Sociedad de Vertebrados de Paleontología de USA, Universidad de Zúrich e Instituto de Patrimonio Cultural de Venezuela, son fieles colaboradores con las investigaciones adelantadas.



Gilcely Linares
Diario El Tiempo
Valera, 08/08/2014


jueves, 9 de enero de 2014

Un mirada a la vida y obra de Juan Antonio Perez Bonalde


Este resumen de la biografía de Juan Antonio Pérez Bonalde se ha hecho a partir de la obra publicada por el Ministerio de Educación en 1973 y escrita por José Ramón Medina titulada “Biografías Escolares Juan Antonio Pérez Bonalde” y de la “Rectificación de la Biografía de Pérez Bonalde” publicada por el Sacerdote Jesuita Pedro P. Barnola.

Nació en Caracas el 30 de enero de 1846. Fue Bautizado en la la Iglesia de la Parroquia Santa Rosalía. Hijo legitimo de Juan Antonio Pérez Bonalde y de Gregoria Pereyra. Su padre fue un destacado miembro militante del partido Liberal. Llego a ser Senador y Presidente del Senado y desempeño el cargo de Ministro en uno de los gabinetes . Debido a la agitada vida política que sufre el país Juan Antonio Pérez Bonalde, padre, decide irse y establecerse con toda la familia en Puerto Rico. Allí transcurre parte de su infancia y su adolescencia, también allí tomo cuerpo su vocación poética. Entre las amistades que cultiva por entonces dos nombres van a perdurar en su memoria y en su cariño. Uno es el también poeta portorriqueño José Gautier Benítez; otro caraqueño, Alfredo Esteller, también desterrado como él. Pérez Bonalde recordará más tarde estando en Nueva York, a estos dos amigos en su poema “Los Tres”. Las mejores horas de la vida en los años de la infancia y de la adolescencia son los que pasa en Puerto Rico. Su estudio de los idiomas y la facilidad que tiene para ellos le hace dominar en breve tiempo el inglés, el alemán, el francés, el italiano y el portugués entre las lenguas vivas. El griego y el latín entre las muertas. Estos magníficos conocimientos le permitirán traducir de obras de Poe, Heine, Shakespeare y Guerra Junqueiro, D’Abreu y Unhland, Herder y Lenau, Ferreira y Saint – Víctor son entre otros, autores de los cuales va a verter algunas obras al castellano.

Su padre recibe buenas noticias de la patria y se decide a regresar esto sucede en 1868. Tiene apenas 22 años e interviene en actividades y campañas públicas. Su actividad en el campo político va a ser breve. No estaba el país, entonces apto para la controversia pública, fecunda, de los partidos políticos. Y al idealista que en él se manifestaba, con sus anhelos de paz y tranquilidad colectivas, de libertad y progreso, de estabilidad política y de orden social verdadero, se oponía la realidad turbulenta de la patria.
Su padre Juan Antonio Pérez Bonalde al regresar a Venezuela se mantiene alejado de las actividades políticas, y al poco tiempo muere a causa de una angina de pecho.
La guerra civil pronto vuelve a encenderse por todos los caminos de Venezuela. Guzmán Blanco hace su entrada triunfal en Caracas el 27 de abril de 1870.
En una corrida de toros celebrada en Caracas fueron recitados unos versos satíricos del poeta en los cuales ridiculizaba a Guzmán Blanco. Este al identificarlo como autor de dichos versos le dio un plazo de ocho días para salir del país. Tenía 24 años apenas y va solo. Deja a su madre enferma y ya no la volverá a verla con vida.

Se va a Nueva York y consigue a los quince días trabajo en una empresa importante, Lahman & Kemp, que se dedica la venta de perfumes, de productos medicinales y de tocador. En el desempeño de su empleo viaja por gran parte del territorio norteamericano. Cuando no viaja se ocupa de la redacción de pubicidad comerciales de la casa para la cual trabaja, y en la elaboración del singular almanaque “Bristol” que produce la misma empresa.
Como agente de esta empresa viaja por Europa, Asia, África, él Caribe y también por el Brasil. Su trabajo no le impide leer y escribir lo que hace con gran entusiasmo. Es asiduo concurrente a la Biblioteca Pública donde años más tarde conocerá a su esposa.

En las noches de ciertos días asiste en Nueva York a unas reuniones de hispanoamericanos que se celebran en el Salón Theiss. Es un lugar situado en la calle 14, donde tocan buena música y se bebe cerveza. Entre los asiduos asistentes a las tertulias que allí se hacen estaba José Martí, el gran patriota y poeta cubano, el combativo periodista y político venezolano Nicanor Bolet Peraza, el colombino Santiago Pérez Triana y Juan de Dios Uribe. En 1875 se agregará al grupo el poeta Jacinto Gutiérrez Coll, Cónsul General de Venezuela en Nueva York.

La etapa más fecunda de creación se produce a medida que avanzan sus años de permanencia en Nueva York. Cuando no escribe su propia poesía, se dedica con verdadero entusiasmo a traducir aquellos poemas de autores extranjeros, en cuyas obras encuentra como un eco de su sensibilidad y de sus preferencias líricas. Estando en Nueva York recibe la noticia de la muerte de su madre lo que lo afecta profundamente a él y a su producción literaria.

Desde su llegada a Estados Unidos en 1870 y hasta 1876 se cumple una etapa muy agitada de su vida y de su creación. Un año más tarde en 1877, publicó sus primeros volúmenes de versos.

A mediados de 1876, Pérez Bonalde regresa a Venezuela. Durante la travesía que lo trae a la patria vuelve a su mente muchos recuerdos. En ese estado de ánimo es cuando empieza a escribir su imperecedero poema “Vuelta a la Patria” que es un canto patético y desgarrado por la patria que se vuelve a ver y por la memoria de su madre muerta.

Pérez Bonalde desembarca en Puerto Cabello. Allí lo espera un nutrido grupo de familiares y amigos.
 
Este segundo regreso a Venezuela es aún más corto que el primero. El presidente Alcántara muere el 30 de noviembre de ese año 1876. Guzmán Blanco vuelve asumir el mando de la república y Pérez Bonalde debe tomar de nuevo el camino del destierro. Vuelve a Nueva York, pasando primero por Puerto Rico.

El año 1879 Pérez Bonalde se casa con la norteamericana Amanda Schoonmaker, a quien conoció en la Biblioteca Pública de Nueva York. Este no fue un matrimonio feliz. Eran comienzos de 1880 cuando nació su única hija Flor, ese mismo año publica su segundo libro de poesía “Ritmos”. A fines de 1883 casi sorpresivamente muere su hija Flor sumiéndolo en el más profundo desconsuelo.

En el año 1884 viaja a Madrid para recibirse como Miembro Correspondiente en América de la Academia Española. Con tal carácter asiste a la sesión que esa institución realiza el 12 de junio de 1884.

Pérez Bonalde no deja de crear, termina y revisa una de sus obras fundamentales “El Cancionero” de Heine. Cuya primera edición fue publicada a fines de 1885. El poeta la dedico a Edward Kemp, factor principal de la firma Lahman & Kemp, quien generosamente costeó la publicación. La obra venía precedida por una carta de Menéndez y Pelayo y un prologo del notable crítico Juan Fastenrath.
 
Estaba terminando el año 1887 y se encontraba enfermo y debió ser recluido en un sanatorio. En este sitio pasara un año. Al salir de él desea regresar a Venezuela y es a comienzos de 1890 cuando lo hace. Guzmán Blanco ya no está en la escena pública pero la política sigue siendo un campo de batalla donde no parece haber tregua.
El prestigio de poeta hace surgir a su alrededor, desde el mismo momento de su llegada, un vivo sentimiento de simpatía. Cuando pisa tierra venezolana, se le prepara un cordial recibimiento.

Meses después de su llegada, el Presidente Andueza Palacios desea distinguirlo con un cargo diplomático, pero su salud no se lo permite. Sus médicos le aconsejan instalarse en el litoral guaireño. Allí vive en la casa de su sobrina Carolina Tesdorpf de Vidal (1). Monseñor Manuel Gámez, dignísimo sacerdote que llevaba 17 años al frente de la Parroquia de La Guaira, es el sacerdote que le visita y le ayuda a bien morir. Allí va a sorprenderle la muerte, víctima de una parálisis total el 4 de octubre de 1892. Fue enterrado en el cementerio de Macuto. Dos días después las tropas del General Joaquín Crespo, encabezando la revolución legalista, empiezan a entrar a Caracas.

Once años más tarde el 4 de octubre de 1903, los restos de Pérez Bonalde son trasladados al Cementerio General de Sur, en Caracas. En esa décima primera conmemoración de su muerte, al trasladar sus restos de Macuto a Caracas un grupo de intelectuales rinde a su memoria el homenaje que mereció en vida y que jamás llegó.

Cuarenta y tres años después, al cumplirse el centenario de su fecha de nacimiento, le fueron acordados a Pérez Bonalde los honores del Panteón Nacional. Sus restos fueron conducidos allí, con toda solemnidad, el 14 de febrero de 1946.

El Poeta de Caracas

Juan Antonio Pérez Bonalde

Pérez Bonalde, poeta Venezolano, máximo exponente de la Poesía Lírica del país, perteneció a la segunda generación del movimiento romántico en Latinoamérica, es considerado precursor del Modernismo por haber traducido obras de Heinrich Heine y Edgar Allan Poe,  nació en Caracas en 1846, el 30 de enero. Fue el noveno hijo del matrimonio integrado por Juan Antonio Pérez Bonalde y Gregoria Pereyra. Huyendo de la guerra federal, la familia Pérez Bonalde se traslada a Puerto Rico (1861). Para sostenerse, fundan un Colegio, donde el joven poeta, de quince años, se desempeña como Profesor. ¿Qué formación tiene Pérez Bonalde para ese entonces? Felipe Tejera dice que se había dedicado especialmente al estudio de la música, el dibujo e idiomas extranjeros.
En 1879 se casa con Amanda Schoonmaker. La unión de esta pareja es desafortunada. En el dolor del exilio, nace una hija, Flor. El poeta concentra en ella sus afectos y alegrías. Le espera, sin embargo, un rudo golpe. La niña fallece en 1883. De esta trágica circunstancia brota esa conmovedora elegía que lleva por título Flor. .

Sus lecturas, su vida errante, su aguda sensibilidad, ciertos aconteceres aciagos, todo lo va conduciendo al escepticismo. A partir de aquel trágico 1883, no vuelve a publicar libros de poesía propia. Sólo sus grandes traducciones, las de Heine y Poe. Busca escaparse de la realidad, ya no por el paisaje poético, sino por la puerta falsa del alcohol y de las drogas. Su salud comienza a resentirse. Quienes lo conocen y lo tratan, como José Martí, advierten en él un aire de melancolía profunda, y de tedio vital. Poco a poco llega a los límites del nihilismo. A la total incredulidad, a una falta de fe en el presente y en el porvenir. Testimonio son estos párrafos de su libro de Memorias, dados por el poeta a la prensa caraqueña:
Muchos años han pasado desde la última vez que dejé un recuerdo de vida en estas páginas. Y ¿qué he conseguido, qué he alcanzado durante este largo transcurso del tiempo? Lo que alcanzaría el hombre que viviese mil años; lo que ha alcanzado la humanidad desde su misterioso principio hasta el presente: NADA!

Su obra poética fue prolífica destacando La Vuelta a la Patria (1876-77), Flor (ya mencionada), Estrofas (1877), Ritmos (1880), Canto al  Niágara (1882), sin duda sus versos más conocidos con prologo de José Martí.

Gravemente enfermo, el 4 de octubre de 1892 muere en el puerto de La Guaira. Once años después (1903) sus restos son trasladados a Caracas en medio de solemnes honras fúnebres. Y desde 1946, centenario de su nacimiento, sus cenizas reposan en el Panteón Nacional. 

He aquí  uno de los más  grandes poemas de Pérez Bonalde es el canto elegíaco que escribe bajo el terrible impacto que le produce la muerte de su hija Flor. Se enfrenta a Dios al no comprender cómo pudo haber sido herida de muerte una criatura que apenas abría los ojos a la vida. Es el dolor máximo, la suprema rebelión de los poetas satánicos, que en Pérez Bonalde es la culminación trágica de una existencia destrozada por el hado: 


FLOR
I
Flor se llamaba, flor era ella,
flor de los valles en una palma,
flor de los cielos en una estrella,
flor de mi vida, flor de mi alma.
Era más suave que blanda arena,
era más pura que albor de luna,
y más amante que una paloma,
y más querida que la fortuna.
Eran sus ojos luz de mi idea,
su frente lecho de mis amores,
sus besos eran dulzura hiblea,
y sus abrazos collar de flores.
Era al dormirse tarde serena,
al despertarse rayo del alba,
cuando lloraba limbo de pena,
cuando reía cielo que salva.
La de los héroes ansiada palma,
de los que sufren el bien no visto,
la gloria misma que sueña el alma
de los que esperan en Jesucristo;
Era a mis ojos condena odiosa
si comparada con la alegría,
de ser el vaso de aquella rosa,
de ser el padre de la hija mía.
Cuando en la tarde tornaba al nido
de mis amores, cansado y triste,
con el inquieto cerebro herido
por esta duda de cuanto existe;
Su madre tierna me recibía
con ella en brazos –yo la besaba…
y entonces … todo lo comprendía
y al Dios sentido todo lo fiaba!...
¿Qué el mal existe? --- ¡Delirio craso!
¿Qué hay hechos ruines? --- ¡Error profundo!
¿No estaba en ella mirando acaso
la ley suprema que rige al mundo?
¡Ah! cómo ciega la dicha al hombre,
cómo se olvida que es rey el duelo,
que hay desventuras sin fin ni nombre
que hacen los puños alzar al cielo.
¡Señor! ¿existes? ¿Es cierto que eres
consuelo y premio de los que gimen,
que en tu justicia tan sólo hieres
al seno impuro y al torvo crimen?.
Responde, entonces: ¿por qué la heriste?
¿cuál fue la mancha de su inocencia,
cuál fue la culpa de su alma triste?
¡Señor, respóndeme en la conciencia!
Alta la lleva siempre y abierta,
que en ella nada negro se esconde;
la mano firme llevo a su puerta,
inquiero … y nada, nada responde.
Sólo del alma sale un gemido
de angustia y rabia, y el pecho, en tanto
por mano oculta de muerte herido
se baña en sangre, se ahoga en llanto.
Y en torno sigue la impía calma
de este misterio que llaman vida,
y en tierra yace la flor de mi alma,
y al lado suyo mi fe vencida.
II
¡Allí está! Blanca, blanca
como la nieve virgen que el potente
viento del Norte de la cumbre arranca;
como el lirio que troncha mano impía
orillas de la fuete
que en reflejar su albura se engreía.
¡Allí está! … La suave
primavera pasó; pasó el verano
y la estación poética en que el ave
y las hojas se van; retornó el cano,
pálido invierno con su alegre arreo
de fiesta y de niños, y aún la veo
y la veré por siempre …¡Allí está!... fría
entre rosas tendida, como ella
blancas y puras y en botón cortadas
al despertar el día.
¡Ay! En la hora aquella,
¿dónde estaban las hadas
protectoras del niño?,
que no vinieron con la clara estrella
de su vara de armiño
a tocar en la frente a la hija mía,
a devolver la luz a aquellos ojos,
y a arrancar de mi pecho los abrojos
de esta inmensa agonía,
de este dolor eterno, de esta angustia
infinita, fatal, inmensurable,
de este mal implacable
que deja el alma mustia
para siempre jamás – que nada alcanza
a mitigar en este mundo incierto.
¡Nada! Ni la esperanza
ni la fe del creyente
en la ribera nueva,
en el divino puerto
donde la barca que las almas lleva
habrá de anclar un día;
ni el bálsamo clemente
de la grave, inmortal filosofía;
ni tú misma divina Poesía
que esta arpa de las lágrimas me entregas
para entonar el salmo de mi duelo…
Tú misma, no, no llegas
A calmar mi dolor…
¡Ábrase el cielo!
¡desgájese la gloria en rayos de oro
sobre mi frente … y desdeñosa, altiva
de su mal sin consuelo
al celestial tesoro
el alma mía cerrará su puerta:
que ni aquí, ni allá arriba
en la región abierta
de la infinita bóveda estrellada,
nada hay más grande, nada!
Más grande que el amor de mi hija viva,
Más grande que el dolor de mi hija muerta!